El verdadero Enano Rojo


Hola, voynicheras y voynicheros. Hoy es 12 de abril y se celebra el Día de la Cosmonáutica rusa, la Noche de Yuri, el Día Internacional de los Vuelos Espaciales Tripulados, y el despegue de la primera lanzadera o transbordador espacial de la Nasa. Irónicamente, también es el Día Mundial de Reducción de Gastos Militares, tiene guasa. 

Por ello queremos rendir nuestro pequeño homenaje a esos valientes, con datos curiosos, humor y ciencia. Hace 54 años un Yuri Gagarin, que tenía la misma edad que tengo ahora, pronunció unas palabras antes de embarcarse:

"Queridos amigos, conocidos y desconocidos, mis queridos compatriotas y a toda la humanidad, en los próximos y breves minutos posiblemente una nave espacial me lleve al distante espacio exterior del universo. 

¿Qué puedo decirles durante estos últimos minutos antes de empezar? Toda mi vida se aparece ante mí en este único y hermoso momento.

Todo lo que he hecho y he vivido ha sido para esto."

Y según despegaba la nave gritó: ¡Poyejali! (¡Vámonos!). Hoy, nos unimos a ese mismo grito.



Advertencia. A lo largo del artículo se hacen pequeñas bromas sobre enanos,
pero no están hechas con intención de herir su dignidad,
hagan como ellos y pásenlas por alto.

El Verdadero Enano Rojo. Por Tony Owen.

En 1988 la BBC Two lanzó una serie llamada Red Dwarf, que debía haber sido traducida en nuestro país como "Enana Roja", como esas pequeñas y frías estrellas. 
Protas de la serie, el de la derecha se quedó a cuadros
al oír como habían traducido el título.
Pero ya sea por un golpe de caloret o porque les sentó mal el relaxing cup of coffe a los traductores locales, o por no tener ni un mínimo de idea, decidieron que como en inglés es de género neutro, pues daba un poco igual. Algunos alegarán que puede ser por cuestiones de derecho del nombre. Pero en el resto de la serie pasa lo mismo con otros nombres de las lanzaderas.

Hemos iniciado con esta reclamación de traducción porque este hecho, que haya una serie que en nuestro país haya recibido el nombre de "Enano Rojo", eclipsa la existencia de una leyenda que nos ha llegado al corazón y que procedemos a compartir con vosotros.
Con todos ustedes, el verdadero enano "rojo".

Casi al final de la carrera aeroespacial (1957-1975), la cual iba ganando la unión soviética en casi todo, con el siguiente palmarés:
  • Primer misil intercontinental.
  • Primer satélite artificial terrestre y solar.
  • Mandar perras a orbitar. (Laika, primer animal vivo más grande que una mosca orbitando en el espacio)
  • Primer hombre y mujer cosmonautas. 
  • Primera foto del lado oculto de la luna.
  • Primera sonda que realiza alunizaje. 
  •  Actividad extravehicular.
  •  Primera sonda que aterriza en otro planeta (venus)...


Lunjod 1, bisabuelo de Cortocircuito
y tatarabuelo de Wall·e.
Después de que los americanos pisaran la luna, se lanzó en 1970 en dirección a ella la misión Lunojod 1 por parte de los rusos.

Era un todoterreno no tripulado a control remoto, enviado para hacer pruebas y tomar datos de la superficie de nuestro satélite. Pero algunos camaradas conspiranóicos no creyeron la "versión oficial" de que hubiesen podido controlar a esa distancia y por control remoto a este juguetito que costaría unos cuantos rublos.




Enano Rojo
A estos genios, que no podían entender que pudieran manejar un robot a esa distancia, se les ocurrió que sería mas fácil que lo que en realidad pasaba es que habían metido dentro de la sonda a un agente enano del KGB. Un Enano Rojo (el único que daba la talla).
En misión suicida por su patria. La misión duró bastante.
Y nos cuestionamos las siguientes incógnitas.

1.-No parece haber un sistema de evacuación de desechos orgánicos.

2.-No parece haber espacio para víveres. y por último pero no menos importante:

3.-No tenía espacio para el vodka.

Conclusión: no llevaron a ningún ser con enanismo a la luna. Aunque si hubiera llegado, seguro que hubiera dicho aquello de "Ésto sí que es un pequeño paso para el hombre..."


¡No hay espacio para el vodka!

Pero a nosotros, el simple hecho de que se creyera tal afirmación nos congratula, nos hace ver al ser humano como a un animal capaz de soñar despierto y creerse sus fantasías. Y esa ingenuidad humana a veces es bella, como cuando un bebé se pede y se ríe. Criatura.

En nuestra imaginación, aparece todo lo que habría tenido que pasar un enano para estar a la altura de ser un miembro del KGB. Esperando que llegara el momento que se preparase un programa espacial a la luna para que lo mandaran allí a morir con honor y en nombre de la ciencia y de la Madre Patria Rusa.


Fiesta de graduación en la academia de cosmoenanonautas.


No te olvidamos, enano fantasma.
Y no podemos dejar morir así como así esta leyenda. Imaginarnos la vida solitaria del cosmoenanonauta, hasta morir de inanición y sufriendo síndrome de abstinencia de vodka. Haciendo pruebas en el suelo lunar y esperando encontrarse con su "Enana Roja".

Así pues, hemos decidido dedicarle unos pocos versos y convertirlo en cuento infantil.

De momento la inspiración nos ha llegado en la lengua verácula de Peter Dinklage.

Dice así (traducción más abajo):

Once upon a time a Dwarf tall as a spoon
dreams about to fly high, and  go to the moon.


He tells Rosaviakosmos about his trip.
And they put him on a nice tinny spaceship.


But before that, there are tests he needs to pass.
They spin him so fast, and watch behind the glass.


He experimented a lot of G forces,
and take a bunch of advanced sience courses


Finally arrives the time of the countdown,
wearing his lil' spacesuit orange, red and brown


There he goes our small hero, my little friends,
And with a glint, with the night sky stars he blends.


On the dust of the moon slowly he landed,
he look at the eath and smiled, candid.


Now if you look avobe to the moon at night,
you could see a dwarf jumping in front your sight


And he sent a radio message to the press,
where he said he's waiting for his red dwafess.
The end



Imágenes inéditas del Lunojod 1

Traducción:
Había una vez un enano alto como una cuchara
Soñaba con volar alto y llegar a la luna


Le contó a Rosaviakosmos acerca de su viaje.
Y ellos lo pusieron en una pequeña y bonita nave espacial.


Pero antes de eso, había pruebas que necesitaba pasar.
Lo hicieron girar muy rápido y miraban desde detrás del cristal.


Experimentó muchas fuerzas G,
E hizo un montón de cursos de ciencia avanzada


Por fin llega la cuenta atrás,
Vistiendo su pequeño traje espacial naranja, rojo y marrón

Allí va nuestro pequeño héroe, amiguitos.
Y con un destello, con las estrellas del cielo nocturno se mezcla.

En el polvo lunar lentamente aluniza.
Mira a la tierra y sonríe cándidamente.

Ahora si tu miras directo a la luna por la noche
Podrás ver al enano saltando frente a tu vista.
Y el envió un mensaje de radio a la prensa.
Donde decía que estaba esperando a su enana roja.

Fin

Pruebas con pequeños soviéticos "¡a toda mecha!" 

En la banda se puede leer claramente: "¡Mi mamá me hizo este jersey espacial!"






Otros Cosmofantasmas



Esta confusión tan entrañable y graciosa, es sólo una del resto de historias de cosmonautas fantasma (que han viajado al espacio, muerto en acto de servicio, pero cuyo deceso nunca ha sido admitido oficialmente), aunque no sólo hay casos de astronautas fantasma de origen soviético, vamos a centrarnos en sólo algunos de ellos:

Profiri Yebenov

Los que sepan algo de ruso ya harán soltado alguna risita.
Resulta que en Moscú, corrió un rumor, de que un tal Profiri Yebenov, que se habría quedado atrapado en la luna en alguna misión, se les apareció desnudo y ayudó a los astronautas del Apolo 11, varados por alguna avería y que gracias al solícito náufrago ruso de la Luna, pudieron regresar al planeta Tierra. Tanto se extendió la historia del supuesto héroe, que el cosmonauta Gregori Grechko, llegó a preguntarle en cierta ocasión a E. E. Aldrin si realmente todo esto fue cierto. Aldrin le contestó que por supuesto, no había visto rastro de vida y mucho menos humana. Parece ser que todo fue un bulo, una broma venida a más, porque como ya sabrán los que sepan algo de ruso, Yebenov significa "Jodido".


Vladímir Sergéyevich Iliushin

Portada del Guinness World Records

de 1964 
Es, supuestamente, el primer hombre en el espacio, incluso antes que Yuri Gagarin, pero que debido a que al volver se quedó un poco "pa' allá"(le habían quedado algunas secuelas psicológicas), pues no era una bandera política y publicitaria muy buena. Así que en teoría le callaron ascendiéndole más rápido de lo que sería legal, hasta que al fin se retiró.

Dicen que en alguna ocasión él mismo lo ha confirmado.

Cuando la noticia fue difundida por un corresponsal que estaba en rusia del Daily Worker extendió el rumor (en aquellos días, las noticias bullían con la carrera espacial y más de alguna noticia poco certera llegaba a los titulares) las autoridades rusas no dijeron nada (ni lo desmintieron, ni lo confirmaron) pero en nada apareció el nombre de Gagarin. Esta vez si, presentado ante todos como un héroe. Ilushin llegó a aparecer en el Libro Guinnes de los Records de 1964.

De nuevo, parece ser que no es del todo cierto.

Iván Istochnikov


¡Hola, soy Juanito Fuentecubierta
y esto es Jackass en el espacio!







Es 1968. La Soyuz 2 parte con la idea de acoplarse a la Soyz 3. Tripulando la nave encontramos a Iván Istochnikov y Kloka, un perrete. En un momento dado, la comunicación con la Soyuz 2 se pierde y la Soyuz 3 se encuentra con el casco de Iván Istochnikov perforado por un micrometeorito, la nave vacía y una nota en una botella de vodka. Las autoridades soviéticas ocultaron los hechos, niegan todo y ocultan las evidencias.

"Todo es ficción". este lema aparecía en los folletos y en la web de la exposición de la Fundación Telefónica.

Joan Fontcuberta, fotógrafo, recibió el encargo de la exposición de Fundación Telefónica en 1997. El nombre del astronauta es la traducción del nombre del fotógrafo, la historia ficticia, pero ganó el Premio Nacional de Fotografía al día siguiente.

Telecinco, se tomó la historia como cierta. Y apareció en el 2006 en Cuarto Milenio, aunque rectificaron al recibir correos de varios espectadores. Una vez más,  todo es ficción.

Ludmila Tokov


"Fa caloret aquí dintre."
En 1965 un periódico italiano, publicó la transcripción de una serie de intercepciones radiofónicas que tenían dos hermanos. En las grabaciones parecía escucharse cómo una mujer cosmonauta rusa, durante la reentrada a la tierra, sentía como se disparaba la temperatura a unos 50 grados en la cápsula, y que ve una llama, pidiendo socorro con desesperación, repitiendo que tiene calor, y que no logra comunicarse. Los soviéticos dijeron que no tenían nada que ver y no se habló más.

Un velo de duda y de misterio nos impide saber cuanto de verdad hay en esta historia. Aunque puede ser que también sea un fraude, porque cuando se producía una reentrada, los sistemas de comunicación no están operativos.

Iván Ivánovich


Iván Ivánovich fue a bordo del Korabl-Sputnik 4 y Korabl-Sputnik 5 (vuelos de prueba de la nave Vostok).



Con estos lanzamientos se pretendía ver si era viable que la Vostok fuera tripuladas por personas reales, porque Iván Ivánovich era un maniquí. Imaginad a los lugareños viendo caer una nave con un maniquí toda vestida de astronauta.

Para evitar la confusión y que pierdan puntos de cordura los campesinos, en el casco llevaba escrito la palabra maniquí en ruso (maket).









"Esos son los llamados héroes"

hasta aquí hemos hablado de mitos, leyendas, bulos, conspiranoias y medias verdades. Pero como ya sabemos, la realidad a veces supera a la ficción. Y si hay unos tipos duros, auténticos Action Man, esos son los astronautas. Vamos a contar las hazañas de un par de rusos más, para seguir con la misma temática. Pero en otras naciones, también hay cada historia de machadas de hombres del espacio para caerse de espaldas y que deberían tener película, YA. Ahora un par de estrellas que para nada son enanos, sino auténticas estrellas gigantes rojas.

Valeri Polyakov

La carrera de medicina tiene fama de larga, ardua y densa. Hay gente que no se conforma con hacer el MIR (Médico Interno Residente) que tantos futuros médicos temen, sino que van mucho más allá.

Con más allá me refiero a Valeri Poliakov, siendo médico espacial, y siendo un referente de expandir los límites de lo que supuestamente un ser humano está capacitado para soportar, fuera de la tierra.

Como digo, no contento con el MIR (o el equivalente en su país), se pasó primero 240 días de nada en la estación espacial MIR, en 1988 y luego otros 437 días en 1994, encerrado en esa lata (más de lo que algunas sondas han tardado en llegar a marte) recorriendo unos 300 millones de km (dos unidades astronómicas, como si hubiera ido al sol y vuelto, mola). Para los que no lo sepan, en el espacio se pierde mucha masa muscular (y levantar pesas en gravedad cero no tiene mucha gracia), y tanto tiempo en el espacio, supone un reto mental y físico, que gracias a un entrenamiento especial, logró soportar. Gracias a este tío, se avanzó mucho en las conclusiones acerca de los efectos de la estancia por periodos prolongados al espacio.


Norman Thagard dijo de Polyakov que su apariencia era "como si pudiera luchar con un oso", vamos que era una bestia parda. Este tío es un campeón.

¿Arriba? ¿Abajo? ¡Esto flota! ¡Pa' dentro!  Reuters via Washington Post

Yuri Gagarin 


Cápsula del Vostok 1
Cuando nos referíamos a valientes tipos duros del espacio, al principio del artículo, nos referíamos a tipos como él.

Yuri Gagarin, el tío que puso su trasero voluntariamente sobre un misil balístico intercontinental R-7 Semyorka modificado.

El que se metió en una minúscula cápsula con una aterradora y fascinante ventanita circular a sus pies, donde podía ver todo el proceso (y nosotros que con una montaña rusa ya nos agarra el nervio y tiembla el esfínter).

El mismo que tiene un pueblo rebautizado con su nombre.


Aquel que estuvo allí arriba unos 106 o 108 minutos y según descendía, la pieza que se tenía que desprender (el módulo de servicio), no se desprendía, ganando aceleración y y temperatura, haciendo que su cápsula girase para todos lados unos 10 minutos con una velocidad angular de 30º por segundo. Hasta que al fin reaccionó el sistema automático y se redirigió la nave. Al final se desprendió, más tarde de lo previsto, pero lo hizo, cuando los remaches y cinchas que sujetaban el módulo se derritieron y el grosor de las placas de protección por aquel entonces eran unas tres veces más delgadas que hoy en día.

Durante ese proceso Yuri 'The Man' Gagarin aguantó fuerzas de 10 G sin desmayarse en la deceleración.

Me gustaría que vierais el siguiente vídeo para haceros una idea. En la esquina superior izquierda aparece una G y un signo de igual  y seguidamente un número que indica la aceleración y cuantas G está soportando el sujeto en la centrifugadora. Ved a cuantos G se desmayan algunos de estos sujetos y comparad.





Llegados a este punto y con este dato, queremos establecer una equivalencia entre una medida que esperemos que se instaure como medida de virilímetro. 10 G = 1 GG (Gagarin's Guts). A mi me parece correcto, justo y necesario.

Y Gagarin tuvo que, antes de que se estrellara la cápsula, salir de ella eyectado a 7 km de altura (obligado por las circunstancias, no como Felix Baumgartner, pero aún así un salto considerable).

Y ahí estaba en su paracaídas, tratando de zafarse del asiento, y cuando lo logra, el kit de emergencia que debería llevar, se desprende y cae. En ése kit, llevaba cosas como un radiofaro, medicinas, y una lancha hinchable que le hubiera venido muy bien, porque le faltó el canto de un rublo para caer en aguas del Volga.

Nos referimos al mismo Yuri Gagarin al que la Federación Aeronáutica Internacional (FAI) no quería reconocerle el récord de primer vuelo en el espacio tripulado, dizque el piloto no aterriza en el ataud esférico ese. Al final le reconocieron que fue el primer hombre en el espacio y crearon en 1968 la Medalla "Yuri A. Gagarin". De hecho, el salto de la aeronave fue ocultado por los soviéticos durante un buen periodo de tiempo.

El mismo que nos dejó una frase, una exhortación, una misión que, nacida desde el dictado de su alma maravillada por lo que veía, nos encomendó:


“Pobladores del mundo, salvaguardemos esta belleza, no la destruyamos”

Yuri Alekséyevich Gagarin









El Cosmoenanonauta se despide. ¡Hasta la próxima entrada!


Extra ball:


1 comentario:

  1. Te recomiendo encarecidamente que escuches esto (la historia del astronauta ruso que pudo morir hasta 7 veces en su estancia y descenso a la tierra con Alexey Leonov):

    http://irreductible.naukas.com/2015/03/18/nuevo-capitulo-de-catastrofe-ultravioleta-vosjod/

    Disfruta (te mandaría el link a iTunes, pero mejor no, que te da urticaria y a mí me da miedito provocarte :-))

    Abrazos,

    Paquito.

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